Y en ese mismo orden. Casi nadie desprecia un día de playa, pero me atrevo a decir que la cantidad de los que despreciarían un día de playa con esta rubia es aún menor.
Es que si te llevan a la playa a relajarte para luego darte una buena mamada y terminar cogiendo, es como el ideal de las vacaciones perfectas. Pero hay que tener en cuenta que el nivel de diversión depende de la belleza de la chica y no cuenta si contratas a una prostituta.